Yo salí de casa con él puesto, a las 9 de la mañana, y lo utilicé en la vía verde, corriendo por los túneles. Pasa desapercibido el frontal, y durante casi de 3 horas me acompañó sin notar que lo llevas puesto.
Lo que más me ha gustado es su ligereza (54g sin pilas), todas las veces que lo he gastado me lo he quitado al llegar a casa y verme en el espejo, se te olvida que lo llevas puesto. Además, la parte posterior donde se alojan las pilas es muy ergonómica y se adapta a la cabeza, al igual que la parte delantera.
El frontal está disponible en 5 colores diferentes: Neón azul, neón verde, neón fucsia (el que yo tengo), neón naranja y neón amarillo.
Tiene tres modos de luz: intensa con 90 lumens (power), baja con 20 lumens (low power) e intermitente (blink). Además, dispone de un led rojo en la parte trasera para hacernos visible también por detrás.
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